Este librajo de Lindqvist, sobre el Exterminio
y sobre, también, El corazón de las tinieblas de Conrad, es…
Habría que tomarse en serio algunas
cosas… pero mucho cuidado con qué cosas nos tomamos en serio. Porque si nos
tomamos en serio las cosas serias no queda otra que, visto lo posesivos y ombliguistas
que somos en nuestro papel estelar de primeros del mundo, pues no quedaría
otra alternativa que coger y corregirnos, en el sentido de, muertos de vergüenza
ante lo estupendos, ¿humanistas?, pedantes y espléndidos que somos, decidir
hacer algo sensato y que cada uno se pire ya mismo directo al tacho de la basura…
Lo anterior, corregirnos desapareciendo,
estaría totalmente justificado por la decencia, la generosidad y cierto sentido
del decoro y la justicia… pero totalmente en contra de nuestro instinto de super estupendo que soy, que otros dicen
de supervivencia…
Entonces la regla vital es que sobre las
cosas serias pensamos de coña y sobre las coñas o banalidades: pues pensamos en
serio y escribimos tratados y damos conferencias y moralizamos y debatimos y
nos forramos todos y nos tranquilizamos todos y nos entretenemos todos y
dogmatizamos todos y nos hacemos las víctimas todos y elucubramos todos y todos
desviamos la atención recreativamente para no pensar y
tomar decisiones en cuanto a la salida única que sería corregirnos…
Sven Lindqvist escribe en
serio sobre las cosas serias… y así no se puede, meu, porque se te saltan los
colores ante tu falta de vergüenza. Te pone en un brete: empezar por uno
mismo e intentar cambiar a mejor en un gesto de equidad… o, bien, olvidar el
libro de Lindqvist… Y claro, siguiendo el instinto de supervivencia y
autocomplacencia: olvidas el librajo de Herr Sven… todo esto resumiendo.
Resumiendo quiere decir que de tanta
razón que lleva Sven y de tan esclarecedor que es su "Exterminad a todos los salvajes"
y de tantos y escabrosos ejemplos que da de nuestra degradación colectiva… y de
tan impresentables que resultan, visto lo anterior, varias de nuestras esencias
e
interminables etcéteras… pues el libro me encantó, me impactó… y a los tres
minutos me olvidé de él ¿instintivamente, voluntariamente? porque, si
no me olvido de él: no se me ocurre otra solución salvo la más drástica…
resumiendo.
Herr Sven repasa lo que todos
sabemos y, a pesar de ello, todos ignoramos, no sé si voluntaria o
instintivamente, o ambasmente. Será por supervivencia. Porque saber
e ignorar vienen a ser lo mismo aunque parezca imposible porque todos
sabemos y conocemos nuestra mugre exterminadora y todos hacemos como si no la conociéramos
con lo que, más bien, la ignoramos y podéis mirar a otro lado pero os recuerdo
que sois unos impresentables lo mismo que yo… resumiendo. Si no lo hiciéramos,
me refiero a ignorar lo que sabemos, ya no seríamos.
Cuando leí El corazón de las tinieblas
me llevé la gran desilusión que se llevan todos los que lo leen pensando que
van a flipar, porque es que no… decepcionante… tras leer "Exterminad a todos los salvajes",
que, tomando como punto de partida el libro de Herr Conrad, realiza un
desinfectante resumen de vilezas y compendio de la infamia humana, el libro
de Conrad
te sabe distinto, mucho mejor… luego, al instante, me olvidé de "Exterminad a
todos los salvajes", vaya sermón el de Herr Sven… y volví a la pedantería ombliguista
de siempre. Miña nai… qué desastre y complacencia. ¿habrá que corregirse? La Corrección supone la
desaparición… por lo menos según alguna de las versiones sobre los límites de dicha correción.
El libro de Lindqvist empieza y acaba
con el mismo párrafo. Al empezar, no entiendes bien, en toda su magnitud, dicho párrafo… cuando, al acabar el libro, te lo vuelves a topar,
ahí sí, te da una bofetada que… necesitas olvidar al momento, por puro instinto
de…Mañana mismo vuelvo a leer el libro de Herr Sven, a ver si así no me olvido de lo que cuenta... pasado mañana también lo leeré, y al día siguiente... y así sucesivamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario