jueves, 31 de enero de 2019

Avendaño/Facer pulgarcitos tres


Tres pulgarcitos facer vinieron a rescatarme de la crisis, lo mismo que Facer pulgarcitos tres. Artefacto espiral. Rompente. CompincheX. No doy más datos… En serio, estaba hasta las narices de la pequeñez… Sí, sí, que no todos son Samuel Solleiro o Manuel Seixas….

Quiero decir que después de Solleiro y Seixas, vaya libros increíbles los suyos, Samuel y Manuel/Manuel y Samuel, seguí por el (supuesto) mismo camino, pensando que todo el monte era mío y que me cagaba en el orégano y en Jauja.

Y me puse con Terminal, de Xelís de Toro: pues no… y con Sinfonía inacabada, de Xavier Manteiga: pues tampoco… y con En perigo de extinción, de Chesi: prefiero no hablar… y antes con Polaroid, de Suso de Toro, bluff… y con Rosa clandestina, de Xesús Valcárcel y con… que moral me sobra…

Me puse con ellos porque además de ser un desnortado, yo; además de tener tiempo, yo; además de que me los recomendaron, ella a mí; además de que nunca pierdo la fe, en un no sé qué indefinido; pues… además pensé que todos serían como Samuel y Manuel/Manuel y Samuel. Y no.

Me los recomendó ella, Dolores Vilavedra, involuntariamente, aclaro, que ella no tiene culpa ninguna, que el enfermo soy yo, en un libro titulado Sobre narrativa galega contemporánea que me topé en la Web buscando las fuentes del Ganges. Y claro, estando yo enfermo, que creo que todo es Samuel y Manuel, Cid Cabido y Ferrín, Cunqueiro y Dieste, Valle e Inclán, Cela y Torrente, Pereiro y Lois, porque siempre voy de dos en dos, como cuando estoy contento, que digo: Frank Zappa; o enfadado, que digo: puta mierda… pues va la autora y en la misma página de su ensayo larga un mejunje en el que no van de dos en dos, las palabras, que van de siete en siete, o más… el mejunje, nos cuenta ella, reúne a los escritores que merecen la pena, caracterizados por su afán de ruptura… buena información, pensé, los escritores que sí. Y claro, pasa lo que pasa… que se confunden las cosas. Culpa mía.

Hubo señuelos en esa página, como témpanos: Manuel Seixas, con su impactante Viñeron do espacio interior… también Cid Cabido... Pero, lo sé ahora, tras leer algunos libros de la competencia, eran témpanos a la deriva rodeados de abondoso tedio, compartiendo correntada ártica con otros autores que no, no y no. Me fié de la lista, que estaba buscando las fuentes de Ganges… y así acabé, con fugas de moral por todos los poros del cuerpo, que alguno de estos libros es que mejor me callo.

Hasta que Facer pulgarcitos tres, de Alberto Avendaño, me gritó un Gran Sí al oído… Facer pulgarcitos tres no aparece en el ensayo que os comento. O eso creo, que sólo lo hojeé.

Debí haber tomado precauciones. En su Sobre narrativa galega contemporánea (2000) la autora cita a Xosé Cid Cabido, qué menos, pero recomienda de él: Días contados y Panificadora… ein? a ver, por favor, Días contados está bien, Panificadora tiene sus cosas, ofcoors… pero es que Herr Xosé Cid da para mucho más: ¿quiere decir, con ello, que estos dos son mejores que Foumán y O camiño de Middelharnis? Error, y no incluyo Blúmsdei porque es posterior al ensayo de Frau Vilavedra.

No sé por dónde seguir, quedo sen folgos... otro día, el próximo, continúo con Facer pulgarcitos tres, de Herr Avendaño. Hoy no pasé del título... qué joya de artefacto espiral. Rompente. CompincheX.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...